HOMENAJE A ALGUIEN GRANDE

Altaïr Ibn-La'Ahad (الطائر ابن لا أحد en Árabe) (nacido en 1165) fue un Asesino durante la época de la Tercera Cruzada, y luego, Gran Maestro de la Orden de los Asesinos. Ancestro de Ezio Auditore de Florencia y de Desmond Miles, Altaïr nació destinado a ser un Asesino; obteniendo el rango de Maestro Asesino a los veinticinco años. Sin embargo, con su fracaso a la hora de conseguir el Fruto que estaba en posesión de Roberto de Sable en 1191, y justo después, permitiendo a los Templarios de Roberto atacar la ciudad de Masyaf, base principal de la Orden de los Asesinos, fue degradado al rango de novicio y enviado en una nueva misión, una oportunidad de redención.

Con el objetivo de eliminar a nueve individuos Templarios, Altaïr empezó una misión en la que tardaría un largo año en avanzar, y poder librar al Reino de la corrupción de los Nueve. No obstante, durante el encargo, Altaïr fue conociendo poco a poco una trama mucho más sinistra y preocupante de lo que creía. Al completar la misión de asesniar a los Nueve, y librar a la Orden de su traicionero líder – Al Mualim – Altaïr ascendió al rango de Gran Maestro, llevando a los Asesinos en una nueva, y más secreta dirección.

Con el Fruto del Edén en mano, Altaïr cambió la forma de vida de la Orden; escribiendo su preciado Códice para informar a las futuras generaciones de miembros de la Orden. Su nombre seguía siendo empleado por los miembros de la Orden en años posteriores, como muestra de la gran influencia que tuvo en la vida de sus sucesores, muchos años después de su fin.

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